Esta es la historia de Jordan Reynolds un chico normal que ha llevado rastas durante una década en su cabeza. Sus padres siempre le apoyaron para que hiciera lo que él viera necesario y no se cortara nunca en llevar un estilo u otro. Le enseñaron a tener respeto a la gente se vistiera como se vistiera y él se crió siendo un niño muy libre en ese aspecto. Así pues, Jordan tenía muy claro desde muy pequeño que quería rastas en su pelo, se las hizo y así ha llevado la cabeza durante más de 10 años. un buen día, de la noche a la mañana, decidió cortárselas de repente y su madre comenzó a llorar desconsolada al ver lo que tenía debajo de ellas.
Un extraño sueño
Una tarde después de comer, Jordan estaba muy cansado porque había madrugado mucho esa semana ya que estaban con los exámenes finales en el instituto así que decidió echarse un rato la siesta antes de volver a ponerse a estudiar. Mientras dormía en el sofá, empezó a tener un sueño muy raro, soñó que iba paseando por la ciudad cuando de repente apareció un león que le perseguía y que le decía que se tenía que cortar el pelo ya.