Esta oveja no tuvo buena suerte
Hace unos cuantos años, en la Ribera del Marco, uno de los canales de agua de regadío de la ciudad de Cáceres, encontraron una oveja muerta. Se desconoce quién era su dueño puesto que el que fuera, le había hecho un corte y sacado la identificación que le ponen a dichos animales para saber a quién pertenecen. El monitor de unos huertos de la ciudad fue el que se encontró con el cadáver y tuvo que notificarlo a las autoridades, cuando llevaba a cabo las tareas de mantenimiento del canal.
Esta oveja no tuvo buena suerte
No solo ovejas, también aves
A los pocos días, este monitor se encontraba de nuevo haciendo las labores de mantenimiento habituales en el mismo canal, en la Ribera del Marco, y esta vez lo que se encontró no fue muy distinto. Otro cadáver, pero en esta ocasión se trataba de una gallina muerta. Parece no tratarse de un hecho muy relevante puesto que los animales en el campo se pueden morir por varias razones, pero hay que tener en cuenta que contaminar las aguas con las bacterias que hay en los cadáveres puede ser muy peligroso.
No solo ovejas, también aves
