Saliendo Por Fin
Los tres restantes del equipo de fuga comenzaron a escalar por las tuberías de la galería para llegar al techo, no les costó mucho trabajo. Una vez arriba tuvieron que abrir una ventana de claraboya para salir al exterior, una vez fuera, tuvieron que ir atravesando todo el techo de la prisión sin hacer ni un solo ruido hasta que llegaron a las tuberías exteriores que dan al suelo. Descendieron por ellas y una vez abajo se situaron estratégicamente para no ser vistos y poder inflar la balsa para salir de la isla.
Fugados
No fue hasta por la mañana que se dio la voz de alarma al ver que faltaban tres presos. Para aquel entonces John y Clarence Anglin y Frank Morris podrían estar ya a kilómetros de distancia y nadie se había percatado de que se habían fugado. Fran Morris, el bien llamado “Artista del escapismo” lo había vuelto a hacer, y además se había coronado con la fuga de la prisión más dura del mundo y de la que nunca nadie había logrado escapar.